jueves, 30 de abril de 2015

Ahora que...



(...no sabes cuánto)

Ahora que soy grande, por no decir mayor, ahora que me pesan como nunca tus momentos y se prolongan cruelmente las resacas.
Ahora que incipientemente níveas hebras pueblan mi cabello delatando el transito del tiempo, y se me escapan de las manos lánguidas muchachas que acaban con mis madrugadas.
Ahora que decido si me voy y me dejan decidir cuando me quedo. Ahora que no callo lo que pienso, ahora que puedo y pago el precio, tolero sin reproches los silencios que secundan mis palabras.
Ahora que los telediarios mienten como siempre, y siempre como nunca  antes una vida emprende en busca de la vida.
Ahora que el mar es un sepulcro y nos estremece hasta las lagrimas la tierra. Ahora que mi corazón sin dextrocardia palpita jubiloso en su sitio que es la izquierda, ahora que el sol calienta los tendidos y los sueños se consuman en el ruedo.
Ahora que no me desespero si tengo que esperarte, ahora que aun no sucumbo ante tus besos, ni desaíro tus abrazos ni imploro ante tu espalda.
Ahora que me recojo más temprano y el agur no duele demasiado, la aurora nos descubre separados después de dejar mi aliento en tu regazo.
Ahora que nadie me cuida y estoy solo echando de menos tú cabello, ahora que ardo lascivo desde adentro.
Ahora que la soledad es mi testigo mientras me transita con enjundia el desconsuelo. Ahora que el tiempo se detiene en tu mirada, reparo por fin en el misterio  y advierto que hablas sola y que te ansío: no sabes cuánto… 

CC